@R_AlarconP
COLOMBIA| Hace apenas unos días las autoridades indígenas hicieron un pronunciamiento publico cuestionando la circulación de panfletos firmados por los grupos al margen de la ley, entre ellos, el de las disidencias de las Farc-ep de la Columna Dagoberto Ramos. Por las constantes amenazas de muerte a la población indígena.
Pronunciamiento de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca
Hace unos días han circulado panfletos firmados por grupos armados de diferentes denominaciones como son el Cartel de Sinaloa y las disidencias de las FARC en cabeza de las columnas Dagoberto Ramos y Jaime Martínez, en los que se amenaza de muerte a distintos compañeros de nuestro proceso organizativo, autoridades, ex autoridades y guardia indígena, de los territorios ancestrales de Corinto, Jambaló, Toribio, San francisco, Tacueyó y Huellas. Rechazamos estas amenazas hechas en un contexto de recientes asesinatos y múltiples confrontaciones militares que cubren de estruendos y lágrimas nuestro territorio.
Las autoridades ancestrales, las guardias milenarias y las comunidades indígenas somos el fruto de un largo proceso de lucha y pervivencia de los pueblos originarios, que ancestralmente hemos habitado estos territorios, en consciencia profunda del ordenamiento natural, revelado desde el mundo espiritual por la vivencia de la ley de origen. Nosotros llevamos 527 años luchando contra la invasión y la conquista del territorio por parte de, la corona española, terratenientes y multinacionales, en el que nuestros compañeros, en esta caso José Norman Montano, German Hilamo, Cresenscio Taquinas, Fabio Casamachin, Giovani Bitonco, Ruben Orley Velazco, Hermes Pete, Gustavo Orozco y todos quienes dan la vida por este proceso, no responden ni al gobierno nacional, ni a las intimidaciones de grupos armados, responden a los mandatos comunitarios y congresos organizativos de los cuales son representantes.
Nunca coordinaremos acciones con la fuerza pública, pues estos obedecen a los intereses de las elites de turno y no aceptamos ni aceptaremos ningún actor armado en nuestro territorio, sea legal e ilegal. En cumplimiento de los mandatos seguiremos desarrollando las acciones de control territorial, desde la fuerza de la palabra, la razón y la chonta, amparados en la ley de origen y el derecho mayor que orientan nuestro gobierno propio. No aceptamos ninguna justificación ideológica para encubrir su accionar delincuencial que se atribuye otras denominaciones como el cartel de Sinaloa para confundir e intimidar a nuestras comunidades, sabiendo que exacerbar la guerra y el narcotráfico es lo que más contribuye a las elites económicas y políticas, en la implantación del modelo neoliberal y capitalista imperante en Colombia.
Responsabilizamos igualmente al Gobierno Nacional por incumplir con la implementación de los acuerdos de paz, así como de la incapacidad de asegurar la vida de 130 excombatientes de las FARC asesinados hasta la fecha, situación que genera un contexto favorable para que estas disidencias vuelvan a tomar las armas, en una regresión histórica frente a la oportunidad de alcanzar la paz que significaba el acuerdo firmado con el anterior gobierno, por lo cual exigimos al gobierno nacional a que cumpla con lo pactado, en especial el capítulo étnico, que hace parte del bloque de constitucionalidad.
Invitamos al ministerio público y las organizaciones de derechos humanos de nivel nacional e internacional a visibilizar nuestro proceso de lucha organizativa, política y social pacífica, así como estar atentos frente al plan de exterminio en contra de nuestro pueblo nasa del norte del cauca y demás sectores sociales de Colombia.
“Cuenten con nosotros para la paz, nunca para la guerra”
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