Artículo original del portal Colombia Opina, del 12 noviembre de 2020
El periodista e hijo putativo del Clan Char del Atlántico se sumó a la estrategia perversa que busca frenar al gobernador del Magdalena.
El polémico periodista Luis Carlos Vélez, conocido por su claro alineamiento a la extrema derecha del país y sus desatinos periodísticos se sumó al ataque del que viene siendo víctima el actual gobernador del Magdalena Carlos Caicedo por parte de sectores corruptos del país, encabezados por el Uribismo, el clan Char del Atlántico (sus parientes) y el Clan Cotes del Magdalena.
Ataque mediático
Vélez se ha dedicado a atacar la gestión del gobernador Caicedo por el simple hecho de ser un mandatario alternativo, alejado de la clase corrupta del país y la región.
El mismo Gobernador Caicedo se dio a la tarea de dejar en ridículo al periodista mostrando que, precisamente miembros de su familia y la de su mujer son quienes los que están detrás de dicha persecución, y que además, callan ante las investigaciones de los políticos aliados al Uribismo en la región, como lo son los Char (familia de su esposa) y los Cotes (aliados de los Char).
Caicedo expuso a Luis Carlos Vélez, tanto su hermana cómo su suegro ocupan altos cargos dentro de la Contraloría General, y que desde allí se ejecutan ataques contra sectores alternativos y protegen a los políticos de derecha, entre ellos a Alex Char, quien tiene múltiples investigaciones que no avanzan.
El ataque mediático de Vélez se suma a los otros de los que ha sido víctima Caicedo, pues contra él no solo por parte la Contraloría, sino además por la procuraduría y fiscalía. Además de los planes que se han conocido para atentar contra su vida.
Asimismo, en el Magdalena, el Clan Cotes dejo una serie de medios y periodistas pagados para atacar a Caicedo mediáticamente, injuriarlo y calumniarlo, así como “defender” a los Cotes de cualquier denuncia que hagan en contra de ellos.
Dichos medios recibieron contratos millonarios durante la administración Cotes, Opinión Caribe, cuello dueño es el arquitecto Víctor Rodríguez recibió un contrato por $360 millones de pesos, al igual que Polo Diazgranados de seguimiento, quienes siempre han mostrado animadversión contra Caicedo y Fuerza Ciudadana.
A esos medios se le suman otros medios de menor relevancia como revista 7, el cual es propiedad de Arístides Herrera, político que se ha lanzado dos veces a la alcaldía de Santa Marta y ha fracasado estrepitosamente, y Lina Peña, una estudiante de periodismo que es la cara de el artículo, así como Yanis Moscote, abogado que tras trabajar años con Caicedo se alió con los Cotes y creó código prensa.
Víctor Polo, el director de caracol radio en Santa Marta también ha recibido millonarios contratos para atacar a Caicedo, lo ha hecho a través de una fundación propiedad de un familiar de su esposa. Desfalcando así a la empresa Caracol radio, que deja de percibir recursos al ser desviados a las arcas de Polo.
Recientemente el alcalde de ciénaga dio un contrato millonario por $1.600 millones a la fundación recién creada de la iglesia de Víctor Polo, el contrato ha sido ampliamente cuestionado por las irregularidades que presenta.
Amenazas contra la vida de Caicedo
La eliminación física es lo último que han intentado los de los clanes políticos tradicionales del país, debido a que todos los planes para acabar con el jurídica, moral y mediáticamente no ha dado resultado, ya que siempre se ha demostrado su inocencia.
Vale recordar que Caicedo ya había recibido amenazas de muerte por parte de Álvaro Cotes, padre de Luis Miguel Cotes y hermano de Rosa Cotes.
El mismo Álvaro Cotes, en un hecho penoso casi cumple su amenaza de muerte a Carlos Caicedo cuando se lo cruzó en el aeropuerto de Bogotá y lo agredió física y verbalmente, aparentemente, Cotes vives actuó cegado por la rabia debido a que su hijo perdió las elecciones contra Caicedo.
Persecución política
Puntualmente en Santa Marta hubo un gran escándalo ya que el director de fiscalías José Vicente Guzmán emprendió una persecución contra Caicedo y el alcalde de ese entonces, Rafael Martínez, quien hace parte del grupo político de Caicedo al final, se pudo demostrar que el fiscal Guzmán hacia parte de una estructura que pretendía, a como diera lugar, quitar del camino a los líderes del movimiento Fuerza Ciudadana. Hecho que además fue calificado como un regalo de cumpleaños de Vargas Lleras a Álvaro Cotes en medio de la campaña presidencial en la que participaba Caicedo y que estaba poniendo en apuros el trabajo del clan Cotes.
No hay que olvidar que a Guzmán lo puso Néstor Humberto Martínez Neira, quien fue uno de los fiscales de bolsillo del Uribismo y que además terminó enlodado en el escándalo de Odebrecht, quien también era abogado mandadero de sarmiento ángulo que en ese momento trabajaban junto a Vegas Lleras, gran mentor y jefe político para ese momento del mello Cotes, además de ser el aliando principal de los Char en su carrera o aspiración a la presidencia.
Todos esos procesos del gobernador fueron montado con el auspicio de Vargas Lleras tratando de fortalecer a Char y a los Cotes y a Cambio Radical en el Magdalena.
Hay que proteger a Caicedo, se evidencia una clara intención de eliminarlo a como dé lugar del panorama político del país ya que puede ser una personalidad importante en las contiendas electorales del futuro.