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¿Honorables congresistas?

PorColumna de opinión

Nov 21, 2020

Por: Iván Fernando Márquez

Honorable significa, persona que es honrada, íntegra, justa y recta en las buenas acciones y merece el respeto de los demás.

¿Cuántos congresistas de Colombia, tienen juicio pendiente con la justica, o fueron, llamados a declarar por algún caso de corrupción, bien sea en la misma política o en su vida personal? O lo que es mucho peor, todavía están inmersos en esos casos de corrupción y sin embargo, ostentan un cargo político o una curul, devengando sueldos elevadísimos.

Pero la culpa no es de ellos, por aspirar o tener un cargo de estos, si no de las injustas y absurdas leyes colombianas, que permiten este exabrupto, al poder ostentar un puesto en el Congreso tranquilamente, cuando lo primordial y fundamental, debería ser: Que la persona sea honrada y no tenga cuentas pendientes con la justicia, o algún caso abierto por un dudoso comportamiento, así si podría ser elegida.

No olvidemos que en el año 2014, habían 35 candidatos al Senado y a la Cámara, investigados por la Corte Suprema de Justicia, por tener vínculos con la parapolítica, solo 9 se quedaron si curul. Es decir 26 congresistas señalados de tener nexos con las AUC, repetirían en el cargo y están siendo investigados por la Corte Suprema, por pertenecer a grupos armados ilegales, pero eso a nadie les preocupó, parecía tan normal en este país.

Así mismo, en el proceso de paz, iniciado por el anterior gobierno de Juan Manuel Santos, muchos ex guerrilleros de las FARC, fueron elegidos para ocupar una curul, sin el voto popular, es decir directamente mediante un decreto, fueron convertidos en congresistas, olvidando al pueblo quien es el que debe decidir, si quiere o no aceptar estas personas en la política.  

¿Con qué moral, se podría llamar democracia y justicia a un gobierno así y honorables congresistas, a unas personas, que tienen cuentas pendientes con las leyes?

La presunción de inocencia, así lo determinan las leyes y los juristas, permite que estas personas aspiren a estos cargos políticos, pero la justica, la ética y los principios morales está en tela de juicio, tanto de los aspirantes, como de quienes avalan, que una persona cuando está siendo investigada, pueda aspirar a un cargo político, solo hasta que se compruebe total y absolutamente su inocencia, ya que esto crea dudas y suspicacias.

¿Y si al final, estas personas resultasen culpables, el dinero que se le pagó como senador o representante, que es una fortuna, sería devuelto? Claro está, que eso es mucho pedirle a las leyes colombianas, si esto sucediera, más de la mitad de estos ilustres y honorables congresistas, como se hacen llamar ellos mismos, estarían tras las rejas o jamás podrían postular sus nombres para ser congresistas.

¿Pero por qué ese afán desmedido, de ocupar un puesto en el Congreso? Los aspirantes invierten cifras elevadas de dinero en sus campañas, para llegar hasta allí, una persona de bajos recursos y sin el reconocimiento de algún partido político tradicional del país, jamás llegará a desempeñar un puesto de estos ¿Será que si el sueldo de un congresista es de uno o dos salarios mínimos, estas personas se esmerarían igual, por llegar al Congreso colombiano?

Lo que hace concluir, que la política es un  negocio, de familias reconocidas históricamente, pudientes y elitistas en donde se puede recuperar el dinero invertido en las campañas, estando dentro de ella y amasar una gran fortuna si es apoyado por las élites y por quienes mandan políticamente en esta nación.

El cinismo, la falta de altruismo y de colaboración, de la gran mayoría de estos congresistas no tiene límites, cuando son entrevistados por los medios de comunicación, lamentándose de las tragedias y dificultades de millones de colombianos, ellos solo dan ideas tan obvias y elementales que causan risa, se creen los genios y más inteligentes que todos, buscando una solución, pero nunca aportan un peso, para paliar las grandes necesidades del país, dinero que es de todos los colombianos, puesto que su sueldo devengado, sale de los impuestos de todos nosotros.

En momentos de dificultades y cuando se trata de colaborar, pero con dinero, no con palabras, ni leyes o proyectos que en nada benefician a los más necesitados, estos jamás aparecen, se gana más de treinta veces lo un salario mínimo colombiano y nunca aportan para una noble causa, son pocos y muy escasos los que han sacado dinero de su sueldo para ayudar a alguien.   

¿Cuánto gana un congresista colombiano, qué prebendas y ayudas recibe al ocupar estos cargos? En comparación con otras naciones, de América y Europa, la diferencia es abismal, vergonzosa y denigrante si comparamos ese sueldo con el salario mínimo de un colombiano, ni hablar de los beneficios, estando en el congreso y después de retirarse si lograr mantenerse varios períodos en ese puesto.

Un congresista colombiano, le cuesta mensual al estado $32 millones, si se incluyen beneficios importantes como primas de mitad de año y navidad, equipo de trabajo, tiquetes, celulares, seguridad, entre otros, ascendería a más de 80 millones mensuales, como si esto fuera poco, en medio de esta pandemia mundial de salud, querían aumentarse el sueldo, que cinismo, que descaro, que falta de sentido común y respeto por las necesidades de millones de personas en Colombia.

El sueldo mínimo de un trabajador colombiano es de $980,657, mensuales que tristeza, no alcanza al millón, una desproporción abismal, asombrosa, vergonzosa, es decir, con un mes de sueldo, de un congresista, sería el sueldo de todo un año, de un pobre obrero colombiano. Es decir al año, un colombiano con sueldo mínimo gana $11,767.884.

Ahora sumemos esos $80 millones de pesos mensuales que gana un congresista por 12 meses, es decir un año, la suma daría $960 millones, sin profundizar mucho, esto recibe un “honorable congresista” luego esta cifra la multiplicamos por cuatro años, en total serían $3,840, millones, son más de tres mil millones, es una cifra escandalosamente alta, si sumar otras prebendas y ayudas, que reciben estos pobres trabajadores.

Esto es lo que ganan algunos congresistas de otros países en relación a Colombia, llevando el sueldo a Dólares.

Chile……………………………… US$11.053

Colombia…………………………. US$9.306

Brasil……………………………… US$8.035

Panamá…………………………… US$7.000

México……………………………. US$5.367

Uruguay…………………………… US$5.249

Costa Rica…………………………. 5.106

Si en Colombia estamos mal y reclamando por el elevado sueldo de los congresistas, los chilenos están mucho peor,será quehabrá alguna manera de acabar con esta tremenda desigualdad e injustica, no solo en Colombia, sino en otros países?

Ahora, veamos alsueldo deuna nación europea, a ellos que les gusta poner de ejemplo a ese continente por su modo de vida, por qué no imitan a ese país y hacen una reforma al Congreso?

Suecia, es el país en donde los Congresistas ganan menos dinero y tienen muy pocas ayudas o prebendas.

Esto es lo que gana un congresista en Suecia. Ellos, ganan 63.000 coronas, en su moneda nacional, que son un poco más de 21 millones de pesos, de allí deben pagar impuestos por dichos honorarios, pero lo más importante es que el sueldo mínimo un trabajador, sueco, son 12 millones de pesos, si notan la enorme diferencia con respecto a Colombia.

Pero no solo eso, son muchísimas más cosas que destacar, con relación a los beneficios que tienen los congresistas en Colombia. Los parlamentarios de Suecia, viven en apartamentos de solo 18 metros, lavan su ropa sin ninguna ayuda y no tenían ningún tipo de empleados estos inmuebles no hay lavadora, ni lavaplatos, ni siquiera cama matrimonial. Una gran parte de estos apartamentos ni siquiera tienen habitación: una sola estancia, amueblada con sofá cama, hace las funciones de sala de estar y dormitorio.

Hasta los años 90, los apartamentos para funcionarios ni siquiera existían en Suecia: los diputados dormían en sofás-cama en sus propios despachos lavan los platos y la ropa en la pila del despacho.

En la cafetería del Parlamento, los diputados se pagan su café.

No hay camareros y hay que pagar por la comida. Después de comer, cada parlamentario debe llevar su propio plato al sitio donde se recogen las bandejas, al lado de la cocina.

Suecia, es el cuarto país del mundo, con mejor puntuación en materia de igualdad social.

Los diputados pueden dejar ocasionalmente a sus hijos, si tienen entre uno y trece años, en la guarderíadel Parlamento durante las sesiones deliberativas. Pero tienen que pagar la comida de los niños.

Los carros no sirven para llevarlos a casa, el único político que tiene derecho a carro de forma permanente es el primer ministro, es decir el presidente del país.

Antes, en 1957 los diputados del Parlamento sueco ni siquiera tenían salario, solo recibían las contribuciones de los miembros de los partidos. Los aumentos de salario de los ministros y del primer ministro también los decide un comité independiente, es decir que el Congreso no tiene nada que ver en esta decisión.

Los parlamentarios suecos tampoco tienen el privilegio de recibir una pensión vitalicia después de cumplir un mínimo de uno o dos mandatos. Reciben una garantía de renta por tiempo limitado, hasta que encuentran un nuevo trabajo, esta ayuda es retirada.

Los alcaldes no tienen derecho a residencia oficial. Y en todas las asambleas municipales del país, la regla no tiene excepción: los concejales no tienen salario, secretaría, asistentes, carro con conductor, ni siquiera despacho trabajan desde casa y ganan solo una pequeña gratificación por participar en las sesiones de la Cámara.

Igualito que en Colombia, que injusticia, hasta cuándo el pueblo va a permitir que esas personas  sigan viviendo de los impuestos y el erario nacional, encima de eso tienen el descaro de decir, que al socialismo le gusta que todo se lo regalen, que no trabajan, como si ellos son el mejor ejemplo de laboriosidad y honradez.   

El pueblo colombiano exige, que se les rebaje el sueldo, para que exista equidad y justicia con relación al sueldo mínimo, pero esta rebaja no debería ser ni siquiera del 50%, ya que hasta 15 millones es demasiado, pero una ley que pretendía reducir el salario a los congresistas, esto no pasó, claro si ellos mismos son los que deciden qué ley pasa o no. 

Es muy triste y doloroso, que esa cantidad de dinero, se le entregue a esas personas, que realmente no se lo merecen, ¿cuántas escuelas, hospitales, o fuentes de empleo, se construirían con ese dinero, para mejorar la situación de vida de miles de colombianos, necesitados y desplazados por la desigualdad social, falta de oportunidades y la violencia que azota a Colombia desde hace décadas?

Estas personas, trabajan muy poco, en los cuatro años que ocupan esos cargos por no decir que nada y encima de eso. Reciben primas millonarias, dos veces al año, así mismo un incentivo como viáticos de 14 millones de pesos, para los que viven fuera de la capital del país.

¿Usted cree que eso es justo. Que se sigan eligiendo a estos supuestos honorables congresistas con estos sueldos tan elevados? Que vivan como reyes y como si esto fuera poco, no se les puede juzgar, mientras ostenten ese cargo, ya que tienen inmunidad parlamentaria, habrase visto semejante injusticia, falta de equidad y ética moral.

 Para terminar de completar el pastel y ponerle la fresa que lo adorna, si son encontrados culpables por algún delito, les dan unos años, como casa por cárcel, se van para una mansión con millones en el banco, a disfrutar sus últimos años de vida, mientras la gran mayoría de los trabajadores, deben partirse el lomo, por más de 30 años y encima de eso, sumar las semanas exigidas por el injusto gobierno, para recibir una miseria de pensión, por más de la mitad de su vida entregada a su trabajo.

Despierta pueblo colombiano, ¿hasta cuándo vamos a permitir estas injusticas y desigualdades?

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