El jefe de diálogos de paz del ELN, Pablo Beltrán pregunta al gobierno de Estados Unidos si ellos, ¿van a seguir saboteando los esfuerzos de paz de Colombia?
MÉXICO | En el Seminario Internacional del Partido del Trabajo de México, el jefe de diálogos de paz del ELN, Pablo Beltrán, habló del impacto geopolítico del futuro proceso de paz en Colombia, y de la importancia del apoyo de los pueblos de Latinoamérica para consolidar una paz definitiva, no solo en su país, sino en la región.
Beltrán hizo referencia a las dos doctrinas propuestas a los pueblos, la de los norteamericanos quienes promueven una “doctrina de guerra perpetua que está enfocada a desarrollar una nueva etapa de guerra fría” siendo este, “el mayor oponente de los pueblos”. Del otro lado, está la propuesta de la Celac, de convertir a América Latina y el Caribe en una zona de paz.
Reflexiona que con la llegada del presidente Gustavo Petro, el pueblo colombiano dio un mandato de cambio, y el principal mandato es “que haya paz y se pase la página de la guerra; en ese esfuerzo estamos la sociedad colombiana”, y asegura estar de acuerdo con la decisión de Petro en trabajar por una paz duradera y definitiva.
“En ese sentido, para nosotros es muy importante contar con el apoyo del resto de los pueblos de América Latina y del mundo; porque el adversario que tenemos es el imperialismo norteamericano no va a cambiar su doctrina de guerra perpetua a las buenas, hay que presionarlo, hay que arrinconarlo para que se vea la inutilidad y la tragedia que le lleva a la humanidad esa doctrina”, expresó Beltrán
Para el delegado de Paz, hay varios obstáculos en el proceso de diálogos e hizo mención a tres. El primero es la doctrina de Seguridad Nacional impuesta por Estados Unidos que trae el genocidio continuado “al considerar que todo él que se opone al modelo económico neoliberal, el enemigo interno”.
El segundo sería, la fracasada guerra contra las drogas que solo produce adicciones y muertes, utilizando los carteles del narcotráfico como instrumento contrainsurgente. Beltrán puntualizó que, tras la unión del narcotraficante Pablo Escobar y los Estados Unidos, se cometió el genocidio contra la Unión Patriótica, y por ello, es importante contar con el apoyo de los pueblos para buscar alternativas a la política antidrogas. Y, el tercero es “ese capítulo de usar las trompas colombianas como peón en las guerras de la Otan, es uno de los obstáculos más grandes que hay para la paz”, asegura Beltrán.
Finalmente, ante el contexto de unos posibles diálogos de paz y la decisión del pueblo colombiano de buscar una paz definitiva, el comandante Beltrán, le pregunta al gobierno de Estados Unidos, en este caso, Joe Bien, dé si ellos ¿van a seguir saboteando los esfuerzos de paz de Colombia?