El jefe de Estado Iraní denuncia que, los actos vandálicos forman parte de un plan para estabilizar el país persa.
IRÁN | El presidente de Irán, Seyed Ebrahim Raisi, este martes durante el funeral de 200 mártires aseguro que, “los brazos de la nación están abiertos para aquellos que han sido engañados, pero no mostraremos piedad con los enemigos”.
Los mártires no identificados son caídos de la guerra impuesta a Irán por el régimen baasista de Irak en los años 1980 y 1988, en Teherán, capital iraní.
Raisi, se refirió a los recientes disturbios registrados en el país persa y ha considerado que el enemigo – desde el exterior- busca atacar el sistema de la República Islámica por los logros alcanzados en las últimas décadas.
“Hemos aprendido de los mártires a vivir con esperanza y hemos aprendido de Fátima az-Zahra [hija del Profeta del Islam, la paz sea con él] que debemos enfrentarnos al enemigo”, ha destacado, asegura el mandatario iraní.
Las autoridades iraníes denuncian que los actos vandálicos forman parte de un plan diseñado y financiado por Estados Unidos, Israel y varios países europeos para desestabilizar el país persa y cambiar el sistema gobernante en la República Islámica.