La línea de vehículo de tanques T-80 puesto en servicio en 1976 en la Unión Soviética, ha tenido una modernización mejorando la potencia de fuego, protección, movilidad y contralabilidad.
La nueva versión T-80BVM, está equipada con un motor de turbina de gas de 1.250 CV, más potente y económico. Permite al vehículo de 48 toneladas acelerar en línea recta hasta 80 km/h, realizar giros de escape y saltos récord bajo el frío intenso: el tanque puede arrancar a temperaturas tan bajas como -50 °C.
Además, está equipado con un blindaje antisubmuniciones combinando con el sistema de protección dinámica Relikt.
Este vehículo blindado ha sido equipado con capas especiales que reducen la posibilidad de apuntar a varias armas guiadas con presión como una “visera” que lo protege de ataques por merodeo, municiones, bombas lanzadas desde cuadricópteros y ataques con drones FPV.
Otra de las mejoras es el estabilizador de arma, un dispositivo de observación TVN-5 para el conductor mecánico y una mira de artillero multicanal Sosna-U. El sistema utiliza un láser para apuntar misiles supersónicos lanzados desde el cañón del arma; esto permite que el tanque destruya objetivos blindados sin entrar en su zona de destrucción.